Hoy se vive la vida con libertad, en cuanto si se quiere o no seguir la moda, se puede ir jugando con las distintas tendencias para ir creando cosas nuevas, el pelo no es la excepción.
Allá por 2019 ya se podía ver un trend de looks muy atrevidos, con pelos muy cortos pintados de colores vibrantes. Y ese fue el disparador, que llevó a este paradigma al siguiente nivel.
Una chica del sur de California llamada Janine Cortez Ker comenzó a estampar su pelo con flores, animal print y corazones, y lo puso de moda. Esta precursora del estilo fue la generadora de esta tendencia súper divertida y creativa.
Se inspiró en sus comienzos en la moda y la música de la década de los 80, y en las formas caleidoscópicas encontradas en la naturaleza creando en cabezas generalmente rapadas diseños interesantes y con un uso expresivo del color.
Ella utilizó su cabello como una forma de expresión y cree que puede servirle a muchos para reafirmar su identidad. Piensa en la cabeza rapada como un canon de belleza, e intenta dar a cada usuario un look único con el cual identificarse y así mostrarse al mundo.
Si!, es como imprimirse en la cabeza, cualquier diseño que uno pueda imaginar, por loco que parezca.
Esta estilista y artista del cabello en sus redes sociales incluye consejos sobre cómo mantener el tinte sin que se desvanezca (enseñó que hay que usar agua fría para lavar el pelo).
Esta revolución de color, como muchas otras tendencias que vimos y veremos a lo largo de este año estan impulsadas por la generación Z que se sube a la nave, siempre apostando a cosas nuevas y atrevidas.
Por supuesto que no es una tarea fácil , esta moda dio dolores de cabezas a los peluqueros que tuvieron que aprender nuevas técnicas de coloración para crear diseños innovadores, llegando a ser algunos verdaderos artistas.
¿Quién iba a pensar que el pelo estampado sería genial? Colores vibrantes y llamativos son una de las características y la imaginación sin límites es la otra.
Como todo lo que rompe esquemas llama la atención, esto es lo que sucedió con los expertos de la moda internacional que lo volcaron a sus pasarelas, como un accesorios que complementaban sus outfits.
Versace fue uno de los primeros en caer ante tan grande ruptura de paradigmas, fue quien contrató a la iniciadora de esta moda como parte de su equipo para introducir esta forma de arte en sus modelos exclusivos.
Burberry no quiso quedarse afuera y se tatuó en el pelo su tradicional ajedrez y lo puso en sus pasarelas.
A esta tendencia lúdica y también efímera, se han sumado varios famosos, entre ellos el cantante latino y polémico J Balvin.
Esta forma de expresión de los más osados pueden realizarse mediante dos técnicas: el tatuaje capilar, en el que el diseño se realiza con una máquina generando con el mismo pelo claro oscuros o el estampado capilar en el que el boceto se realiza mediante la coloración.
Si bien en este momento se focaliza más en varones no es exclusiva de estos, ya que se adapta a cualquier género, lo importante es atreverse.
Entonces, ¿te animarías a sumarte a esta tendencia?